Provincia de Buenos Aires: la VTV ya cuesta desde $79.600 y el aumento supera el 150% en un año
La Plata. — La Verificación Técnica Vehicular (VTV), obligatoria para circular en la Provincia de Buenos Aires, se ha transformado en un nuevo golpe al bolsillo de los automovilistas bonaerenses. Desde septiembre de 2025, el trámite tiene un costo que arranca en $79.600, lo que implica un incremento superior al 150% respecto de los valores vigentes en 2024.

El aumento, que se ubica muy por encima de la inflación acumulada, genera un profundo malestar entre la clase media y baja, que ve cómo mantener un vehículo en condiciones reglamentarias se vuelve cada vez más inaccesible.
Una suba que contrasta con los discursos de campaña
Durante la última campaña electoral, el gobernador Axel Kicillof insistió en la necesidad de recomponer el poder adquisitivo de los trabajadores y aliviar la carga impositiva sobre los sectores populares. Sin embargo, el ajuste de la tarifa de la VTV parece ir en sentido contrario.
Lejos de representar una medida aislada, este aumento se suma a otros incrementos en servicios y tasas provinciales, lo que refuerza la percepción de que el Ejecutivo bonaerense no prioriza la defensa del bolsillo ciudadano. Para numerosos analistas, el esquema de aumentos constantes termina consolidando un círculo vicioso: el empobrecimiento progresivo de las familias bonaerenses.
El peso de la VTV en los gastos del hogar
El trámite de la VTV, que debía ser un control técnico destinado a garantizar la seguridad vial, se ha convertido en un impuesto encubierto. Con un costo que supera ampliamente el salario mínimo por hora trabajada, el impacto sobre el presupuesto de un hogar promedio es significativo.
Para muchas familias de la provincia, afrontar casi $80.000 anuales por vehículo equivale a destinar buena parte del ingreso mensual a un solo trámite obligatorio. Y si se trata de hogares con más de un coche, el monto resulta directamente prohibitivo.
Una política que profundiza la desigualdad
La suba de la VTV deja en evidencia una contradicción: mientras el discurso oficial asegura defender a los sectores populares, las medidas económicas continúan deteriorando su poder adquisitivo. Los aumentos de tarifas y servicios, sumados a la escalada inflacionaria, fuerzan a miles de bonaerenses a postergar consumos básicos, al mismo tiempo que deben cumplir con obligaciones estatales cada vez más costosas.
En este contexto, crece la crítica de que el gobierno provincial apuesta a mantener una masa de pobres dependientes de la asistencia social, consolidando así su base política a costa de los trabajadores formales y la clase media.
Seguridad vial vs. recaudación
La finalidad original de la VTV —garantizar que los vehículos circulen en condiciones técnicas adecuadas para prevenir accidentes— queda relegada frente a la percepción de que el trámite se transformó en una herramienta de recaudación masiva. La magnitud del aumento, en un escenario de crisis económica, alimenta la desconfianza ciudadana y genera un sentimiento de injusticia.
El incremento de la VTV en la Provincia de Buenos Aires, con valores que superan los $79.600, no solo impacta en el bolsillo de los bonaerenses, sino que también desnuda la contradicción entre las promesas de campaña del gobernador Axel Kicillof y la realidad de su gestión. La medida profundiza el deterioro económico de la clase media y baja, reforzando el cuestionamiento de que, lejos de aliviar la pobreza, el gobierno provincial se beneficia de ella para sostenerse políticamente.